Cuidando nuestro patrimonio

Durante un veraneo en una población hermosa, a la que no volvía desde hacía muchos años, vi que el castillo, en el que durante mi juventud había jugado con mis amigos, estaba abandonado con paredes derruidas y grietas en algunas de ellas. Sentí una profunda pena, pero no lo comenté con nadie, y al regresar a mi ciudad, me olvidé de ello.

Al verano siguiente, cuando regresé, la sensación se incrementó ya que las lluvias torrenciales de la primavera, habían hecho mella en aquel maravilloso edificio del siglo XV.

Una tarde de charla con amigos y vecinos, a la sombra de una hermosa y anciana encina, les propuse ponernos todos manos a la obra para encontrar una solución que pudiera ayudar a preservar aquella obra y entre todos, la encontramos. Decidimos proponer la monitorización, con IoT a través de sensores que pudieran facilitar en tiempo real el estado de la torre

Se la planteamos al ayuntamiento y a día de hoy aun disfrutamos de nuestro hermoso castillo que además es un atractivo para visitantes del lugar.